La titular del Juzgado de instrucción número 1 de Santiago tomó ayer declaración a tres imputados más del caso Mahía Inmobiliaria. Se trata del director de Administración de la empresa, Iñaki Rodríguez; de la directora financiera Alicia Rodríguez y de Pablo López Fernández, el segundo hijo del presidente de Mahía Inmobiliaria, Ramón López Casal, quien ya había declarado también como imputado en este mismo juzgado el pasado 27 de octubre.
Todos ellos están presuntamente involucrados en un delito de «apropiación indebida y administración desleal». Esta notificación a la autoridad la puso en marcha Manuel Gómez Maroñas, uno de los socios fundadores de esta empresa dedicada al mundo de la construcción.
Maroñas explicó ayer a este diario por qué: «A partir del año 2001, Ramón López Casal fundó otra empresa, Habitarama, que después pasó a llamarse Maexpa. Está a nombre suyo y de sus hijos, exclusivamente. López Casal hace uso de toda la estructura del grupo de Mahía Inmobiliaria, tanto de los locales, el personal y todo lo que hay, y lo traspasa directamente a Maexpa». Es decir, presuntamente hubo un delito de descapitalización. Y es que, según Maroñas, «si en el año 2002 Mahía Inmobiliaria tenía 1.800 viviendas construidas, este año tenemos poco más de cien, mientras que él ha comenzado con cinco mil novecientas ya con Habitarama».
[button size=’medium’ style=» text=’VER NOTICIA COMPLETA’ icon=’fa-angle-down’ icon_color=» link=’http://www.elcorreogallego.es/santiago/ecg/maronas-acusa-lopez-casal-bajon-mahia-inmobiliaria/idEdicion-2006-11-04/idNoticia-100660/’ target=’_blank’ color=» hover_color=» border_color=» hover_border_color=» background_color=» hover_background_color=» font_style=» font_weight=» text_align=» margin=»]